Nuestro viaje por Turquía, sucintamente, para no aburrir.

Como este blog, no es de viajes, si no del viaje de Miguel, no me explayaré demasiado.

Pasamos 6 maravillosos días en Estambul, pateando la ciudad de arriba a abajo, a pie, en buses y en barco, y, la verdad, es que te encuentras con una ciudad estupendamente gigante y atractiva. Visitamos las mezquitas más importantes, Santa Sofía y la Mezquita Azul, el Palacio de Topkapi, el Gran Bazar, y otros muchos más sitios para conocer a las gentes y sus costumbres, comimos de su comida, bueno no es que se la quitáramos de las manos, jajaja. No bebimos de su agua, sin embargo, y regateamos al comprar las pocas cosas que compramos, pasando un agradable y buen rato.

Helados típicos de Estambul

zumo de naranja exprimido en el  momento. 0.40€

Santa Sofía

la Cisterna

danza de los derviches

Tras esos primeros días, alquilamos una furgoneta Dobló, compramos una tienda de campaña para 2, que junto a la tienda de Miguel y a la furgoneta, nos proporcionaba alojamiento para los 4.

Hemos dormido en playas, campos, hotelillos, pensiones e incluso en una húmeda y barata suite en Goreme. Hemos visto y paseado, playas, pueblos, pantanos y lagos, alguno de ellos salados, además de ruinas romanas, griegas y bizantinas. Hemos visitado Capadoccia, Pamukkale, Troya, Ankara, Izmir o Esmirna...
De manera totalmente desorganizada han transcurrido los 23 días del viaje, tan rápido como un sutil parpadeo, disfrutando de la compañía de Miguel, su sabiduría y su conducción. Ha sido, en fin, un viaje para no olvidar, rico en sensaciones, emociones, sabores, olores y buena compañía.
Turquía es un pais encantador.

 

 

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